En estoy días estoy contando en clase de filosofía del derecho algunos aspectos del concepto de justicia en la antigua Grecia. Sobre el tema hemos leído algunos escritos sobre Sócrates, el más irónico de los filósofos, el maestro de Platón y el principal crítico de los sofistas, aunque algunos afirman que el mismo Sócrates perteneció a este grupo. Nos encontramos en el siglo V a.c, en el siglo de Pericles o de "las luces en Grecia", después de la famosa batalla de Maratón, en el 490 a.c, en donde los griegos vencieron a las tropas persas de Darío y consolidarón definitivamente su poder.
Sócrates el hijo del cantero y escultor Sofronisco parece que nació en el año 469 a.c en una época en donde ya se encontraban filosofando retóricos como Protágoras, Demócrito, Gorgias e Hyppias... La labor de Sócrates, según los diálogos platónicos, fue poner contra las cuerdas a estos expertos en la argumentación que preparaban a políticos y aristócratas en el arte de la oratoria y el convencimiento, y que cobraban por su oficio. Su método fue la mayéutica, hacer parir las ideas a través de preguntas puntuales con respuestas cortas en donde "el adversario" o contradictor caía en cuenta de su error o concebía sus ideas a través de esta esgrima intelectual que muchas veces se asemejaba a los interrogatorios policiales o judiciales.
La muerte de Sócrates fue descrita también por Platón y se dió en el año del 399 a.c cuando después de ser acusado de corromper a la juventud, de adorar a unos dioses diferentes a los griegos y de desconocer a su vez a los dioses de la "polis", es condenado a la pena de muerte. En el diálogo con Critón se describe cómo Sócrates decide no escapar a su castigo y cumplé con la sentencia porque considera que ir en contra de ella sería ir en contra de su misma virtud - ethos -; de este modo toma la cicuta y muere para no contravenir las leyes de la ciudad a las cuales se había sometido voluntariamente y de las que se había beneficiado, ya que según expresa en el diálogo, con estas había contraído matrimonio, había educado sus hijos y había celebrado contratos. La pregunta, sin embargo, que se empiezan a hacer los helenistas desde hace algunos años, es si este personaje existió realmente o si es una invención literaria de Platón.
Luri Medrano afirma que fue el historiador Dupreel el primero en atreverse a relegar a Sócrates al terreno de las fantasías literarias. Sin embargo, Gigon afirmó que: "1. No puede negarse la existencia de un personaje histórico llamado Socrátes, hijo de Sofronisco y Fenerete, cuyo trágico fin estimuló su transformación en personaje literario, pero no podemos estar seguros de que sostuviera ninguna de las doctrinas que se le atribuyen ... 2. Parece verosímil - pero solo verosímil - su participación en alguna de las muchísimas expediciones militares atenienses así como en un juicio público celebrado en Atenas el año 406 a.c con los generales responsables de la batalla naval de las Arginusas... Es creíble - sólo creíble - que muriera, tras un proceso, en el año 399 a.c".
No obstante lo anterior, para otros autores como el filólogo griego Boekch, el mismo Platón nos hace ver que todo se trata de una broma intelectual a través del nombre del supuesto mentor y los nombres de su familia y su origen: "Sócrates significa en griego algo así como el dominio de la sana razón. Su padre, Sofronisco, venía a ser un diminutivo de Sofrón, que se puede traducir por prudente, y su madre, supuestamente llamada Fenarete, es la que trae a la luz la virtud, la partera de la virtud... Sócrates nació supuestamente en el barrio de Alópece, o sea, del zorro, ese animal taimado, embaucador e irónico, justamente en el día en que se purificaba la ciudad y se conmemoraba a la diosa de los partos, Ilitia", por todas estas razones Boeckh cree que la creación de Sócrates se trata de un chiste de Platón sobre un supuesto maestro que lo enmascararía a él mismo bajo un seudónimo que facilitaría hacer sus diálogos.
Tal vez ninguno de esos estudios tengan razón y Sócrates existió y filosofó en los alrededores de Atenas, caminando con sus discipúlos y cuestionando a los supuestos sabios que venían a la ciudad. De no ser así en todo caso su legado todavía nos pone a discutir a los profesores de filosofía, ética, política, historia, filología y derecho, y tal vez sea cierto lo que dijó el catedrático español Juan Mairena: "Dios hizo a los griegos para que pudieran comer los profesores del porvenir". (Referencias tomadas del libro de LURI MEDRANO, Gregorio, Guía para no entender a Sócrates: reconstrucción de la atopía socrática, Madrid, Trotta, 2004, pp. 15 - 17 - p. 142)
*Este post fue tomado de IUREAMICORUM (Blog de Gonzalo Ramirez Cleves, entrada de 4 de abril de 2008, pinche aquí para ver la entrada original con sus comentarios, entre otros el del profesor Gregorio Luri Medrano, autor del libro reseñado)
Sócrates el hijo del cantero y escultor Sofronisco parece que nació en el año 469 a.c en una época en donde ya se encontraban filosofando retóricos como Protágoras, Demócrito, Gorgias e Hyppias... La labor de Sócrates, según los diálogos platónicos, fue poner contra las cuerdas a estos expertos en la argumentación que preparaban a políticos y aristócratas en el arte de la oratoria y el convencimiento, y que cobraban por su oficio. Su método fue la mayéutica, hacer parir las ideas a través de preguntas puntuales con respuestas cortas en donde "el adversario" o contradictor caía en cuenta de su error o concebía sus ideas a través de esta esgrima intelectual que muchas veces se asemejaba a los interrogatorios policiales o judiciales.
La muerte de Sócrates fue descrita también por Platón y se dió en el año del 399 a.c cuando después de ser acusado de corromper a la juventud, de adorar a unos dioses diferentes a los griegos y de desconocer a su vez a los dioses de la "polis", es condenado a la pena de muerte. En el diálogo con Critón se describe cómo Sócrates decide no escapar a su castigo y cumplé con la sentencia porque considera que ir en contra de ella sería ir en contra de su misma virtud - ethos -; de este modo toma la cicuta y muere para no contravenir las leyes de la ciudad a las cuales se había sometido voluntariamente y de las que se había beneficiado, ya que según expresa en el diálogo, con estas había contraído matrimonio, había educado sus hijos y había celebrado contratos. La pregunta, sin embargo, que se empiezan a hacer los helenistas desde hace algunos años, es si este personaje existió realmente o si es una invención literaria de Platón.
Luri Medrano afirma que fue el historiador Dupreel el primero en atreverse a relegar a Sócrates al terreno de las fantasías literarias. Sin embargo, Gigon afirmó que: "1. No puede negarse la existencia de un personaje histórico llamado Socrátes, hijo de Sofronisco y Fenerete, cuyo trágico fin estimuló su transformación en personaje literario, pero no podemos estar seguros de que sostuviera ninguna de las doctrinas que se le atribuyen ... 2. Parece verosímil - pero solo verosímil - su participación en alguna de las muchísimas expediciones militares atenienses así como en un juicio público celebrado en Atenas el año 406 a.c con los generales responsables de la batalla naval de las Arginusas... Es creíble - sólo creíble - que muriera, tras un proceso, en el año 399 a.c".
No obstante lo anterior, para otros autores como el filólogo griego Boekch, el mismo Platón nos hace ver que todo se trata de una broma intelectual a través del nombre del supuesto mentor y los nombres de su familia y su origen: "Sócrates significa en griego algo así como el dominio de la sana razón. Su padre, Sofronisco, venía a ser un diminutivo de Sofrón, que se puede traducir por prudente, y su madre, supuestamente llamada Fenarete, es la que trae a la luz la virtud, la partera de la virtud... Sócrates nació supuestamente en el barrio de Alópece, o sea, del zorro, ese animal taimado, embaucador e irónico, justamente en el día en que se purificaba la ciudad y se conmemoraba a la diosa de los partos, Ilitia", por todas estas razones Boeckh cree que la creación de Sócrates se trata de un chiste de Platón sobre un supuesto maestro que lo enmascararía a él mismo bajo un seudónimo que facilitaría hacer sus diálogos.
Tal vez ninguno de esos estudios tengan razón y Sócrates existió y filosofó en los alrededores de Atenas, caminando con sus discipúlos y cuestionando a los supuestos sabios que venían a la ciudad. De no ser así en todo caso su legado todavía nos pone a discutir a los profesores de filosofía, ética, política, historia, filología y derecho, y tal vez sea cierto lo que dijó el catedrático español Juan Mairena: "Dios hizo a los griegos para que pudieran comer los profesores del porvenir". (Referencias tomadas del libro de LURI MEDRANO, Gregorio, Guía para no entender a Sócrates: reconstrucción de la atopía socrática, Madrid, Trotta, 2004, pp. 15 - 17 - p. 142)
*Este post fue tomado de IUREAMICORUM (Blog de Gonzalo Ramirez Cleves, entrada de 4 de abril de 2008, pinche aquí para ver la entrada original con sus comentarios, entre otros el del profesor Gregorio Luri Medrano, autor del libro reseñado)